¿Qué se espera en el futuro de las telecomunicaciones?

El mundo y las telecomunicaciones están en constante cambio y actualización. Algunos de esos cambios son inesperados y circunstanciales, no podemos llevar control sobre ellos y será en la medida que tengamos la capacidad de adaptarnos y reaccionar ante esos cambios que podremos decir que lo hemos librado con éxito. Sin embargo, existe otro tipo de cambios: los que de manera intencional podemos provocar nosotros.

El mundo y las telecomunicaciones están en constante cambio y actualización. Algunos de esos cambios son inesperados y circunstanciales, no podemos llevar control sobre ellos y será en la medida que tengamos la capacidad de adaptarnos y reaccionar ante esos cambios que podremos decir que lo hemos librado con éxito. Sin embargo, existe otro tipo de cambios: los que de manera intencional podemos provocar nosotros.

Será la intencionalidad en trabajo e investigación lo que hará que los cambios se sigan dando.  Para nadie es un secreto que, lo que en un momento en esta área representaba un lujo y, hasta cierto punto, ventaja competitiva por la escasez de su alcance, hoy en día se convierte en una norma mínima de tenencia por parte de las compañías.  Elementos como las líneas terrestres, celulares e internet son claros ejemplos de cómo hoy en día no podemos imaginar una compañía (o una familia) que no cuente con estos servicios.

Esta accesibilidad que se tiene ha provocado un cambio cultural y de negocios frente a las telecomunicaciones.  La aceptación de la tecnología en la sociedad ha logrado que las empresas de telecomunicaciones pasen al frente de la curva tecnológica por la relevancia que tiene para la ejecución de muchas tareas.  Hoy en día se considera que esta industria se un habilitador de cambio de negocios, económico y social.

La conducta del ser humano se ha visto afectada por los cambios tecnológicos que se han, siguen y seguirás presentando.  El involucramiento y peso que tiene en la sociedad las redes sociales, el trabajo desde casa, educación virtual, servicios de almacenamiento en “nube”, el comercio electrónico, banca en línea entre otros, son solo un ejemplo de algunos elementos que se han convertido en un nuevo estilo de comportamiento en el mundo entero gracias a la tecnología.

¿Qué se espera en el futuro?

El crecimiento y solidificación de estos elementos, así como el desarrollo y adaptabilidad a nuevas experiencias que hoy están iniciando su actividad. Actividades como la telemedicina, la transformación en la manufactura, la ampliación en la movilidad, la evolución de automóviles, la presencia de realidad virtual en tiempo real, entre otros, se o en parte de esos elementos que deben estar listos para que sean más comunes en nuestro diario vivir.

El futuro es promisorio, pero desafiante. Se requiere un sistema de modificación en nuestra forma de pensar para poder generar la adaptabilidad que estos cambios requieren. El triunfo no depende solamente de la rapidez con que se presenten los cambios, sino del éxito en la flexibilidad que se tenga a dichos cambios y la apertura a seguir esperando más de ellos.